La Verdad

miércoles, 13 de mayo de 2009

Anciana clama por ayuda tras perder casa en la que vivió por 60 años

SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Aurora Santana, 65 años –según su cédula de identidad- que aparenta 75 u 80, perdió el único activo tangible que la vida le regaló como herencia de sus padres: la humilde casa de madera que le daba cobijo ardió en llamas el pasado 22 abril.

Por fortuna, no se encontraba allí cuando el siniestro –causado por una falla eléctrica- derribó postes, tablas, zinc y todos sus ajuares.

La casa, ubicada en Villa Consuelo, había sido dividida en tres piezas con fines de alquiler.

Los inquilinos Jacquelin Santana Núñez y José Altagracia Rojas Santana también sufrieron los estragos del fuego y se vieron obligados a buscar techo en casa de amigos y familiares.

Doña Aurora –viuda, con dos hijos desempleados y uno de ellos recluido en Hogar Crea- también ha hallado refugio, para pasar cada noche, en casa de una vecina, porque de día ella monta vigilia en los escombros de lo que era su casa.

Teme que desaprensivos invadan su heredad. Por eso, a un mes de haber ocurrido el incendio, se ha habituado a colar café, lavar la ropa, cocinar y asumir otras labores cotidianas entre aquellos restos que reflejan una casa fantasmal, en la que ha vivido los últimos sesenta años.

Aunque los vecinos han sido solidarios, especialmente para darle refugio por las noches, doña Aurora dice que quiere dejar de rodar, por lo cual apela a la solidaridad del Despacho de la Primera Dama.

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