La Verdad

jueves, 7 de mayo de 2009

Alburquerque fustiga a Fernández por su postura ante la cúpula empresarial

El presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Ramón Alburquerque, consideró que la confrontación del Palacio Nacional con la dirección del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), excluyéndola de reuniones de evaluación sobre la marcha de la economía, reafirma la intolerancia y prepotencia del presidente Leonel Fernández, quien no acepta que el pueblo dominicano vive una de las peores crisis en toda su historia.

Planteó que el CONEP ha mantenido una laudable posición de rechazo al dispendio oficial y a las violaciones constantes a las normas presupuestarias cometidas con la anuencia del presidente Fernández y, quien insiste en defender una nómina pública supernumeraria y abusiva, con el propósito de satisfacer sus compromisos clientelistas frente a la pobreza generalizada de la ciudadanía.

La verdad es que no basta que los bancos tengan disponibilidades por 20 mil millones de pesos cuando la demanda de bienes y servicios se ha caído por el desplome de las remesas, las dificultades del turismo, la baja de las exportaciones y el cierre de zonas francas las cuales fueron condenadas a desaparecer por el propio Fernández al tildarlas de modelo superado, expresó Alburquerque.

Sostiene que los empresarios tienen razón al exigir un plan estratégico para dinamizar la economía, con medidas creativas que partan con una rigurosa regulación del gasto oficial para no generar inflación y evitar que se produzcan déficit indebido que siempre terminan cubiertos con el crédito disponible en el sistema bancario nacional.

“Al excluir al CONEP, el gobierno intenta debilitar la institucionalidad de un sector vital a la fortaleza económica de la nación enviando un peligroso mensaje contrario a la armonía que ha de primar entre la administración del gobierno y los entes productivos” agregó.

Alburquerque entiende que el gobierno procura insuflar miedo en los líderes empresariales del país castigando así su responsabilidad al señalar que las cosas no andan bien.

Señala que nadie se explica por qué Fernández se empecina en ignorar la crisis en momentos en que la ciudadanía no encuentra literalmente qué comer, en medio del grito callejero de que el dinero ha desaparecido.

El presidente del PRD dice que lo peor es que los funcionarios sabenque mienten porque la administración de Fernández ha sido derrotada por la crisis eléctrica a pesar de la caída de los precios del petróleo, que se han perdido más de 250 mil plazas de trabajo, que los altos funcionarios ganan lo que les da la gana produciendo desaliento en la población, que la corrupción hace de lo suyo, que las autoridades sucumben ante el narcotráfico y la delincuencia lo domina todo.

Ante este cuadro, afirma Alburquerque, lo menos que debe hacer el gobierno es enfrentar los sectores productivos cuando su único delito es decir la verdad.

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