Decenas de viviendas siguen anegadas en poblaciones de Barahona

BARAHONA.- La destrucción de la compuerta del CañoTrujillo por la embestida del río Yaque del Sur, tras este aumentar su caudal como consecuencia de las lluvias provocadas por la tormentas Gustav y Hanna, así como por el huracán Ike, perjudicó seriamente a varias comunidades situadas en la cuenca baja del río, pero salvó de un desastre a la población de Jaquimeyes, cuyos moradores agradecen a Dios ese milagro. "La destrucción de esa compuerta que permitió que el agua se fuera directo a la laguna Rincón de Cabral, nos libró de un seguro desastre, por que damos gracias a Dios, aunque lamentamos que otras comunidades hayan sido inundadas, pero estamos contentos porque no se han registrado pérdidas de vida humanas", coincidieron Miguelina Féliz Espinosa y Radhamés Batista Féliz. Actualmente, miles de tareas cultivadas de diversos rubros agrícolas están anegadas en El Peñón, Pescadería, La Hoya, Cabral, Habanero, Hato Viejo, Fundación, entre otras comunidades de la cuenca baja del Yaque del Sur, mientras cerca de 900 familias están en los albergues habilitados en la provincia, 147 de las cuales se encuentran en los pabellones de gimnasia del Complejo Deportivo de esta ciudad. De estas 900 familias, 209 corresponden a la comunidad de Cristóbal, provincia Independencia, lugar que al igual que la Hoya y El Peñon, en Barahona, están con el agua a nivel de las persianas de las viviendas. Por su parte, el Comité Provincial de Emergencia, informó que a pesar de la magnitud de las inundaciones en Cristóbal y Barahona, no se han registrado desgracias personales, aunque sí, muchos daños a la agricultura e infraestructuras viales. Mientras, que el tránsito vehicular desde esta ciudad a Neiba sigue paralizado por la carretera que pasa por los bateyes del central azucarero local, debido a los daños sufridos por la vía por la zona e al comunidad de Mena, Tamayo