La pobreza sigue campando por su respeto en RD

SANTO DOMINGO.- La lucha contra la pobreza, primero entre los Objetivos de Desarrollo del Milenio, avanza a trompicones en la República Dominicana, no obstante los altos índices de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) alcanzados durante los últimos cuatro años.

Conforme los datos aportados por “República Dominicana en cifras 2008”, una publicación anual de la Oficina Nacional de Estadísticas, en 2006 el 3.11 por ciento de la población vivía con menos de un dólar por día, mientras que en 2002 ese porcentaje era de 2.11 puntos.

La publicación no ofrece datos para los años 2003 y 2004, durante los cuales la quiebra fraudulenta de los bancos provocó una abrupta caída en los índices de crecimiento del PIB e incrementó en más de un millón el número de pobres. Tampoco los hay para el año 2007.

Empero, entre 2005 y 2005 decreció en un 3 por ciento la población que vive por debajo de la línea de pobreza, mientras que la indigencia solo disminuyó un 0.3 por ciento, al pasar de 28.8 a 28.5 por ciento.

En lo que respecta a la pobreza urbana, la variación positiva es de 3.6 por ciento entre los años 2005 y 2006. En el primero, el número de personas viviendo por debajo de la línea de pobreza representaba era de 45.4 por ciento de la población asentada en las ciudades, disminuyendo a 41.8 por ciento en 2006.

En la zona rural, el número de personas en esta última condición es mucho mayor que en la urbana, 49.5 por ciento, aunque entre 2005 y 2006 descendieron en 1.9 por ciento.

La segunda meta de este objetivo, la reducción a la mitad de la población que padece hambre entre 1990 y 2015, tampoco exhibe logros relevantes en el país. Entre los años 2000 y 2002 hubo una variación negativa de 0.7 por ciento en el número de niños menores de cinco año con peso inferior al normal, al pasar de 4.6 a 5.3 por ciento, respectivamente, los infantes en esta condición. En 2006, eran el 5.3 por ciento, descendiendo a 4.3 por ciento en 2007.

Los datos anteriores se traducen en una bajísima participación en el consumo nacional del quintil más pobre: apenas el 3.42 por ciento de los bienes son consumidos por este sector de la población.