La Verdad

viernes, 23 de enero de 2009

Ventas vehículos nuevos en año 2008 las más bajas en últimos 4 años


La Asociación de Concesionarios de Fabricantes de Vehículos (ACOFAVE) reveló que el año 2008 significó una caída en las ventas de un 29% cuando se compara el 2008 con el 2007 y de un 52% por ciento cuando se comparan las 16,808 unidades del segundo semestre del 2007 con las 8,059 unidades del segundo semestre del 2008.

El Director Ejecutivo de ACOFAVE, Enrique Fernández, informó este jueves en rueda de prensa que las nuevas proyecciones para el mercado de vehículos nuevos durante el 2009 apenas alcanzan 12 mil unidades cifra que llevaría esta estadística a la misma cantidad de unidades vendidas en el tristemente recordado año 2003.

ACOFAVE atribuye la caída de las ventas al incremento de las tasas de interés y a la escasez de crédito bancario. Mientras las tasas de interés bancarias se han estabilizado y no ha habido incremento durante los últimos cuatro meses, y desde diciembre se percibe una tendencia a la baja.

Todavía se hace necesario que el Banco Central baje las tasas de sus Certificados a Plazo fijo que están al 18% sustancialmente para que se comience a sentir la disminución real y efectiva en las transacciones bancarias.

Se reiteró la preocupación de los integrantes de la Asociación ya que continúan las importaciones de vehículos que exceden el período de cinco años de antigüedad que la Ley 147-00 permite para los vehículos de pasajeros y los quince años permitidos para los vehículos de carga de más de 5 toneladas.

Se expresó que el grueso de las importaciones de vehículos de pasajeros corresponde a vehículos del 2000 y más antiguos y que muchos de los camiones que están llegando usados al país exceden los veinte años de antigüedad. En otros países de Latino América, como es el caso de Bolivia, se están prohibiendo las importaciones de esos vehículos con más de cinco años de antigüedad.

Además en momentos en que entidades como el Fondo Monetario Internacional solicitan al gobierno central que busque un equilibrio en la balanza de pagos, una forma de conseguirlo es aplicando la ley. La cantidad de vehículos usados que entran al país excediendo los límites permitidos por la ley, son un gran peso a la balanza comercial.

Todos los países están tomando mediadas de incentivos fiscales a las empresas para estimular la inversión y la creación de empleo, eliminando o reduciendo las medidas de fiscalización y presión tributaria.

Las empresas asociadas de ACOFAVE solicitan de las autoridades que se atiendan los temas que afectan al sector de importación de vehículos para prevenir un impacto negativo en los niveles de empleo y su contribución al fisco. En tal sentido se enumeran los siguientes temas:

Aplicación rigurosa de la prohibición de importaciones de los vehículos usados de pasajeros de más de cinco años y de los vehículos pesados de más de quince años.

Reducción del monto de la primera placa a los vehículos pesados y la eliminación de dicho impuesto a los montacargas y otros bienes de capital que no son propiamente de transporte sobre carreteras.

Adecuación de los niveles de arancel a todos los vehículos para disminuir el desvío de comercio que se produciría de implementarse al pie de la letra las disposiciones legales y los tratados de libre comercio. La falta de adecuación de estos niveles contribuirían a un mayor deterioro de los ingresos del Estado por concepto de arancel.

Que se le de prioridad a la importación de vehículos nuevos, ya que su aporte fiscal es mucho mayor que las unidades usadas además de que aportan un menor nivel de contaminación al medio ambiente.

Una reducción real de las tasas de interés bancaria a los inversionistas y consumidores.

Implementación de medidas efectivas de control de la contaminación en los vehículos nuevos, en los importados usados y paulatinamente en el parque vehicular existente para reducir la incidencia de enfermedades pulmonares y respiratorias y su alto costo para el sistema de salud público y privado.

Tomar en cuenta que en momentos como estos los países afectados por la crisis mundial, se deben poner en orden la situaciones de informalidad, por lo que se solicita a las entidades pertinentes que formalicen a los vendedores de vehículos que operan en patios y avenidas y que no tributan de acuerdo a la ley y en muchos casos evaden no sólo los impuestos sino también la carga social correspondiente a sus propios empleados.

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